Giuseppe Verdi (1813-1901)

La carrera de Giuseppe Verdi abarca tres cuartos del siglo XIX. Nació en 1813 en Roncole, cerca de Busseto, al norte de Italia. Hijo de un tabernero, empezó a destacar como músico local. El estímulo y patrocinio de su futuro suegro, Antonio Barezzi, le permitió estudiar en Milán, antes de regresar a Busseto como maestro de música. Su primera aventura en la ópera fue Oberto, en 1839, que fue bien aceptada por el público, pero fue seguida del fracaso de Un giorno di regno.

Su reputación creció debido al éxito de la ópera Nabucco, presentada en La Scala en Milán en 1842. La carrera posterior de Verdi en Italia lo llevó a una fama sin igual, aumentada por su reputación como patriota y ferviente defensor de la unidad nacional italiana. Contrajo matrimonio con la cantante Giuseppina Strepponi en 1859, año de su ópera Un balle en maschera (Un baile de máscaras). Completó su última ópera, Falstaff, en 1893, cuatro años antes de su muerte. Murió en Milán, a principios de 1901. Su muerte fue motivo de duelo en toda Italia.

Giuseppe Verdi dominó el mundo de la ópera italiana desde su primer éxito importante en 1842 con Nabucco hasta sus últimas óperas shakespearianas, Otello, representada en La Scala de Milán en 1887, y Falstaff, montada en la misma ópera en 1893.

Óperas 

Verdi escribió 28 óperas. Las más conocidas son Nabucco (Nabucodonosor), Macbeth, Rigoletto, Il trovatore (El trovador), La traviata, Simon Boccanegra, La forza del destino (La fuerza del destino), Don Carlo, Aida, Otello y Falstaff.

 

Música sacra

Además de componer un Te Deum y un Stabat Mater, Verdi escribió un impresionante Requiem a gran escala, cuyo origen se deriva de las muertes de Rossini en 1868 y del escritor Manzoni. El Réquiem es una obra de magnificencia operística, y conmovedora por sus elementos teatrales.

Le Quattro pezzi sacri (Las cuatro piezas sacras) fueron escritas varias veces en los últimos años de Verdi. La primera, Ave Maria sulla scala enigmatica, escrita en 1889, fue seguida de la publicación de Stabat Mater, Laudi alla Vergine Maria (basada en un texto de Dante) y Te Deum para coro doble y orquesta. Le Quattro pezzi sacri fueron publicadas en 1898.

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